Crucigrama

La desesperanza está hecha por quienes  cansados de esperar dejan de tocar las aldabas de la tristeza y abandonan el último optimismo.
Está llena de domingos de lluvia, de jueves a solas, tazas vacías, cielos grises, andenes repletos y pájaros cansados de la primavera.
Es un paisaje de ausencias y espejos empañados del vapor de la ducha y sábados, también sábados de sol que se marchitan a los pies de un banco de plaza en el que picotean palomas blancas que no traen consigo la paz.
La desesperanza es el mosaico de la palabra que no dice ni nombra pero que pese a todo nos salva del tiempo, del llanto y la terapia.
Es un abrigo sin remiendos que recién estrena la nostalgia y se detiene en el beso de dos amantes, viejos conocidos, que gastaron sus cuerpos y se entretienen con los crucigramas del diario.

Comentarios

Entradas populares